Sinopsis

Cuando nos adentramos al estudio «serio» de las pirámides de Egipto, nos damos cuenta de lo asombroso que es el tema de la profecía, profecía que está a la par de las Sagradas Escrituras cristianas. Y aunque sabemos que la charlatanería abunda y que ha desviado a muchos hacia la ficción, esto no le quita lo más mínimo de espiritualidad y misterio digno al tema. De tal magnitud es el misterio y la revelación de su contenido que el desinteresado esfuerzo y la admirable dedicación de muchos científicos de prestigio mundial los ha llevado al cuestionamiento si es que acaso en la construcción de las pirámides la intervención sobrenatural se hizo presente. Ya que no hay manera de explicar de manera sensata como una cultura retrógrada que en ocasiones ha sido juzgada como primitiva; pudo construir una obra tan perfectamente matemática, geométrica, geográfica, cartográfica, esotérica y profética como la gran pirámide de Keops. Y aunque la ignorancia de un gran sector del cristianismo considera que las pirámides y sus enigmas son temas exclusivos de sectas místicas, demostraré en este estudio que la Gran pirámide de Keops fue la primera Biblia de Dios para la humanidad, no porque yo lo crea, sino porque la misma Biblia lo dice.